Era el dia que tocaba ver Verona, con todos los anteriores con calor y justo se levanto un dia de perros, lo ideal para fastidiar la agradable visita a la ciudad.
Intente aprovecharlo al máximo en interiores y probando durante la mañana alguna foto “charquera” como las denominaban mis amigos de viaje.
A veces el agua que tan malas pasadas nos juega a los amantes de la fotografía deja que captemos efectos como este que fue buscado por mi en esos días y que al final conseguí al menos en parte.
El charco no daba para más, era imposible sacar la fachada entera aunque por arriba se vea un pequeño margen, un pena pero al menos quedo reflejado parte de lo que buscaba.
La imagen se corresponde a la Catedral Santa Maria Matricolare.
Espero como siempre vuestros comentarios.
Verona, Duomo, Santa Maria Matricolare

Un saludo a todos.