Siempre que conviertas de un formato a otro vas a perder calidad , más o menos , pero vas a perder , lo ideal , si el Studio no te da problemas es que trabajes con el vídeo capturado tal cual , sin comprimir , y luego cuando ya esté terminado busques el formato de compresión que mejor se adapte a tus necesidades y/o posibilidades.
Por ejemplo , si vas a grabar en un DVD convierte a mpeg-2.
Si vas a pasarlo a un CD y el reproductor de tu salón acepta Xvid/Divx , pues uno de estos dos codecs.
Y si no tienes grabadora de DVD y tu reproductor de DVD no coge los *avi (Xvid/Divx) pásalo a Video CD.
También puedes hacer pruebas partiendo de la base de que el archivo original no lo pierdes, puedes probar a convertirlo a varios formatos y quedarte con el que más te guste en cuanto a tamaño/calidad.
Pero eso sí , recuerda no convertirlo hasta que no esté editado , a no ser que el Studio te dé problemas y tengas que hacerlo para poder trabajar en condiciones.