Creo que a todos nos ha pasado más de una vez: vemos algo diferente, que llama nuestra atención y que pensamos que merece una foto. Sin embargo el resultado final no termina de convencer.
Ahí está nuestro reto: lograr una buena foto que transmita. Hay que darle vueltas, probar encuadres, diferentes diafragmas o velocidades, y así y todo muchas veces no lo conseguimos. Así que hay que seguir practicando.
De todos modos el árbol es precioso. Si lo tienes cerca puedes probar a ir a otras horas o probar un encuadre más dramático.