Por si no quedaba claro, “El que rompe paga”.
La tensión era constante en el comercio jaja, teniendo cuidado de no tocar nada sin querer al menos con la mochila que llevaba la cámara a la espalda, que los precios la verdad no eran para andar haciendo estropicios.
Como comentaba a mis compañeros de viaje, nunca había tenido tanto cuidado con las cosas ni siquiera en casa.
Salimos triunfantes de la tienda con alguna compra y sin romper nada eso si.
Una foto curiosa al menos de estos italianos que teniendo un país tan bonito yo diría que en parte desprecian nuestro turismo ignorando casi por completo explicaciones e ilustraciones en castellano.
Por cierto en algunas ciudades que visite que son patrimonio de la Humanidad ni tan siquiera encontré un DVD de ellas, todavía andan con el VHS, yo miraba y no daba crédito, solo les habría faltado alguna cinta en BETA para rematar la faena, o alguna casete ilustrativa para Spectrum o Comodore de de pantalla de fósforo verde.
El que rompe paga
