Los arrestados pertenecen a todos los estratos sociales y entre ellos se encuentran menores de edad y otros que superan los 60 años. Entre los arrestados hay estudiantes universitarios, profesores de instituto, arquitectos, un policía local, administrativos o jubilados.
Las distintas operaciones que integran este dispositivo especial, denominado “Lobos”, han sido posibles gracias a las informaciones proporcionadas por ciudadanos anónimos, asociaciones de defensa del menor, la colaboración internacional a través de INTERPOL y EUROPOL, y fundamentamente, gracias a la investigación y trabajo de los ciberpolicías de la Brigada de Investigación Tecnológica. En esta operación la cooperación internacional ha sido imprescindible, de hecho los agentes han remitido a través de INTERPOL más de 200 IP´s a diferentes países, sobre todo de Sudamérica, que han sido investigadas.
Uno de los detenidos es un padre de familia y profesor de instituto que confesó ser el creador de esas páginas que contenían fotografías de menores junto a otras personales del detenido en actitudes sexuales.
Otra de las detenciones fue posible gracias a la denuncia de la madre de la víctima, una menor que fue coaccionada a través de la técnica conocida como “grooming”. El detenido, de 19 años, logró intimidar y coaccionar a la menor para obtener imágenes de ésta a través de la webcam y colgarlas posteriormente en la Red. Los agentes localizaron en Internet otros doce videos introducidos por el ahora detenido, ubicándose en total a seis menores víctimas de sus amenazas y coacciones.
Gracias a la comunicación recibida por INTERPOL Wiesbaden, en Alemania, se ha podido detener también en este dispositivo, a otras cinco personas que compartían y ponían a disposición de los internautas un archivo que contenía una brutal agresión sexual a una niña de trece años. Un delito por el que fue ya detenido el agresor en Estados Unidos, pero que es perpetuado en la Red con la difusión de estas imágenes.